martes, 14 de febrero de 2023

EL ANTICRISTO, RELATOS DE AMOR QUE CAMBIAN VIDAS 2° AÑO

Qué es el anticristo se menciona en la biblia en muchas ocasiones, bajo el entendimiento humano es necesario ponerle un nombre al ser que vendrá contrarrestar la voluntad de nuestro Señor para impedir el plan de salvación que Dios tiene para con nosotros. Es cierto aquel ser vendrá en los días postreros. Veamos en este punto lo que menciona las escrituras. 
Apocalipsis 13, 2 
Y la bestia que vi era semejante a un leopardo, y sus pies eran como de oso, y su boca, como boca de león. Y el dragón le dio su poder, y su trono y gran autoridad. 

Pues bien, si nos hemos percatado encontramos la descripción de la bestia, tiene una forma ciertamente inusual antes no vista a la vez que se le describe como una conjugación de los animales feroces, también lo había profetizado Daniel en el antiguo testamento en su libro en el capítulo 7. 

La biblia denota al demonio “Como un león al acecho de su presa” la figura del dragón, también es una de las bestias, se menciona siguiendo el texto; pero ahora esta bestia actúa con el mismo sentido que el dragón pues le dio su trono y autoridad. 

Tenemos claro que estas cosas sucederán al final de los tiempos, pero acaso si Dios nos hizo a su imagen y semejanza y estas situaciones están siéndonos reveladas en este instante cobran sentido en este preciso instante en nosotros. Podemos percibir certeramente comprender la naturaleza de estos hechos, pero ¿Podríamos experimentar situaciones similares que se describen en dichos textos bíblicos ahora? 

Apocalipsis 1, 8 
Yo soy el Alfa y la Omega, principio y fin, dice el Señor, el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso. 

Apocalipsis 22, 13 – 15 
Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin, el primero y el último. 

Los textos se tocan, en el caso del primero, al comienzo del libro del apocalipsis y el segundo en la parte final. 

En ambos mencionan claramente principio y fin, pero acaso alguien puede ser inicio y a la vez fin pues el hombre, ciertamente, no, pero, Dios nos lo está revelando que con su naturaleza divina y como es todopoderoso, sí. 

Ahora en el primero menciona claramente ser antes, ahora y después, pero en el segundo menciona ser también el primero y el último, es a la vez como una persona, un sujeto que también puede ser primero y último. 

Apocalipsis 17, 8 
La bestia que has visto, era, y no es; y está para subir del abismo e ir a perdición; y los moradores de la tierra, aquellos cuyos nombres no están escritos desde la fundación del mundo en el libro de la vida, se asombrarán viendo la bestia que era y no es, y será. 

Es claro mencionar que el demonio cuando fue creado “era”, luego, cuando se rebeló contra Dios con un tercio de los ángeles, dejo de ser “y no es”; finalmente al final de los tiempos va a actuar “y será”. 

Pero continuemos, solo para terminar este paréntesis el demonio “será” por poco tiempo. 

Apocalipsis 2, 3b 
Y prendió al dragón, la serpiente antigua, que es el Diablo y Satanás, y lo ató por mil años. Y después de esto, debe ser desatado por un poco de tiempo. 

Los textos del apocalipsis acerca del alfa y omega el principio y fin nos dan claras luces a Dios ser el mismo tiempo o como creó el tiempo y todo lo demás tener toda potestad por sobre cuanto significa para el desarrollo de la vida y eso nos da claras cuentas que tiene autoridad de decir acerca del demonio “no es”, porque su comienzo, al rebelarse, desechó este privilegio, el de ser. 

Un siguiente texto bíblico nos lleva a entender mejor. 

2 Pedro 3, 8 – 10 
Mas, oh amados, no ignoréis esto: que para con el Señor un día es como mil años, y mil años como un día. El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento. Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras que en ella hay serán quemadas. 

La autoridad y la potestad del Señor en los cielos y la tierra les son enteramente suyas, es por eso que es paciente, tanto que para nosotros es muy conocido el mencionar “los tiempos del Señor son perfectos”. “Mil años como un día para y un día como mil años” estos tiempos son para integrar la unidad que le pidió Jesús al marcharse de la tierra. 

Entonces cerrado el paréntesis volvamos al primer texto “Y la bestia que vi era semejante a un leopardo, y sus pies eran como de oso, y su boca, como boca de león”. Nos percatamos al describirlo así que, no cabe dentro de nuestros cánones ni antiguos ni actuales un ser con estas características; es porque las está describiendo bajo una figura literaria. 

Un versículo antes lo menciona con estos detalles. 

Apocalipsis 13, 1b 
Y vi subir del mar una bestia que tenía siete cabezas y diez cuernos; y en sus cuernos diez diademas; y sobre sus cabezas, un nombre blasfemo. 

Aunque igualmente utiliza dichas expresiones literarias, el texto bíblico de apocalipsis utiliza símiles como de las parábolas que solía utilizar Jesús, vemos expresiones o figuras literarias que nos llevan a recorrer verdades profundas en comparaciones coloquiales, palabras que concuerdan con su naturaleza divina manifestada. 

Deseáramos que no fuese a revelarnos de este modo, es por eso que Jesús usaba repetidamente la expresión “en verdad, en verdad les digo” o en otras versiones “de cierto, de cierto os digo” porque la verdad estaba en Él, es el verbo encarnado, el hijo de Dios manifestado a los hombres. 

Nos explica Jesús que estas expresiones están hechas para quien quiera oír no oiga y quien quiera ver no vea. La palabra de Dios nos da el coraje de salir a enfrentar las vicisitudes del mundo cotidianamente. Salir con espíritu de verdad porque nos da al estar bajo su amparo, al enfrentar a las acciones del mundo, sabemos que estamos bajo la protección del Señor, de tener su gracia actuando en cada cosa que hacemos. 

Sin embargo, es necesario remarcar aquí que esta bestia claramente muestra la actitud de fieras salvajes recreado en una abominación que simplemente causa pavor, igual el profeta Daniel describió a estos animales en sus profecías. 

Esta bestia es a la que se le ha denominado el anticristo porque con sus actitudes muestra a animales fieros, que son el pecado recreado, los que conducen a ir en contra de los designios de Dios. En el final de los tiempos lo reconoceremos ya, como una persona, un ser humano, mientras tanto, lo reconocemos claramente como el pecado. 

Génesis 4, 7 
Si tú haces lo bueno yo te aceptaré, pero si haces lo malo, entonces el pecado te estará esperando para atacarte; te quiere dominar, pero tú debes dominarlo a él 

Sigamos con los textos bíblicos donde se siguen dando detalles de la bestia dotada de la autoridad del dragón, que este último –el dragón– es el diablo, Satanás, la serpiente antigua. 

Apocalipsis 13, 3
Vi una de sus cabezas como herida de muerte, pero su herida mortal fue sanada; y se maravilló toda la tierra en pos de la bestia. 

Antes de continuar mencionarles “Y sobre sus cabezas, un nombre blasfemo” el nombre blasfemo se trata del rey de Judea, Herodes, cuando Jesús nació. También en la biblia indica que su hijo Herodes el tetrarca fue quien dio muerte a Juan el bautista, por el baile que había hecho la hija de Herodías, Salomé, y ella pidió por esto la cabeza de Juan en un plato porque él le reclamaba que no le era lícito tenerla al ser, Herodías, esposa de su hermano, Felipe. 

El tiempo es potestad de Dios y que para Él mil años son como un día y un día como mil años, se refiere a que los hechos pasados cobran una trascendencia, cobran potestad en los seres humanos tienen un significado, tienen una connotación que debemos remarcar para seguir obrando en los caminos del Señor, recurrir a las lecciones que estos hechos anteriores nos darán la sabiduría para saber conducirnos. 

Herodes siendo judío y viviendo allí en su gobierno conocía los textos del antiguo testamento, del que se decía “ha de venir un rey de Judea”, había de venir el mesías, pero pensó sesudamente que vendría y se instauraría como uno igual a él, para hacer un gobierno de hombres, claro que estaba equivocado todo lo de retirar el poder de Roma y sus emperadores. 

Nada más ajeno a la realidad, por eso Jesús fue claro en mencionar cuando había sido entregado a Pilato. 

Juan 18, 36
Jesús respondió: Mi reino no es de este mundo. Si mi reino fuera de este mundo, entonces mis servidores pelearían para que yo no fuera entregado a los judíos; mas ahora mi reino no es de aquí. 

Sin apartarnos más, Pilato fue quien condenó a Jesús no Herodes, pero aquel rey judío instauró la idea de matarlo; con eso detendría al gobierno que erigiría para salvación de los judíos, a la nación elegida, al pueblo de Dios, simplemente, este rey ha impuesto una ideología para detener los designios de Dios, así como él creyó en instaurarse para siempre, o el linaje de él, entonces sin contemplaciones intentó asesinarlo. Acerca de Herodes, que luego su hijo continuó su linaje con la esposa de su hermano Felipe. 

Mateo 2, 11 – 12 
Entraron en la casa y vieron al niño con María, su mamá; y postrándose lo adoraron. Abrieron sus cofres y sacaron unos regalos para él: oro, incienso y mirra. Después, Dios les dijo en un sueño que no volvieran a donde estaba Herodes, así que regresaron a su país por otro camino. 

Cuando nació Jesús, los sabios de oriente adoraron al niño y luego sabiendo las intenciones de Herodes de querer matarlo, por revelación de Dios, no le indicaron donde estaba e hicieron otro camino de regreso. 

Efesios 6, 12 
Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes. 

Entendemos que la idea que ha instaurado Herodes de matar a los hombres de Dios para hacerse de los tronos o mandatos de gobiernos de las naciones continúa y son ahora la certeza de su pensamiento se convirtieron en ideologías, filosofías, corrientes filosóficas, tipo de gobiernos como la aristocracia, la monarquía, la democracia, el comunismo los cuales ahora se erigen estar por encima del hombre, y contrario a los designios de Dios. 

Es decir, el demonio fortalece porque el hombre es llevado a su servicio, el hombre no mira más a Dios ahora mira su tipo de gobierno, lo juzga, lo repone, lo dirime, crea leyes, y todo bajo el amparo de la ideología, el partido, las filosofías, las leyes creadas, bajo el estricto cumplimiento de legados terrenales o del mundo, alejados de lo espiritualidad. 

Ya no es el hombre en su palacio reinando ahora son principados y potestades de la antigüedad como se indica en el texto bíblico, ven al hombre como intercambiable, renovable, pasan sus hechos y sus obras las olvidan porque no son obra de la gracia de Dios. 

Es decir, si en nuestra actualidad vemos a un hecho político que vislumbra a un pueblo o a una nación, ya no es el hombre con la gracia de Dios que lo hizo con sabiduría, vemos un tipo de gobierno correcto y leyes acordes, y eso debe continuar seguir erigiendo ideologías y tipos o corrientes de gobierno –principados y potestades como menciona Jesús– a través de las normas y estas normas antiguas o nuevas siguen evolucionando y ya no el hombre, el hombre cede su protagonismo al ponerse a su servicio. 

Cuando sucede un caso inverso un gobernante que no vislumbra, se le retira y se hace correcciones a la ideología, también a las penas carcelarias por estos delitos parten de esta ideología y no se halla más algo humano en quienes dirigen los destinos de un pueblo. 

El hombre ya no busca agradar a Dios, no cambia sus actitudes. 

Sus correcciones van en el sentido corregir la ideología o las leyes, encontrar pensamientos iguales, y no, a las personas correctas. 

Entonces aquí entra a tallar lo que menciona Jesús. 

Mateo 7, 16 – 20 
Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos? Así, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol malo da frutos malos. No puede el buen árbol dar malos frutos, ni el árbol malo dar frutos buenos. Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y echado en el fuego. Así que, por sus frutos los conoceréis. 

Las ideologías pueden cortarse, echarse, quitarse pues todas dan frutos malos son sujetos a cambios contrario a servir al hombre, es el hombre que les sirve; sea al partido, sea a la ideología, sea a las leyes del partido. 

Pero el hombre, el rostro del hombre pareciera no trascender más las obras que lo llevaron allí, les son retiradas por lo errores siguientes; pero aunque dichas ideologías institucionalizadas en los gobiernos nos llevan a masacres, guerras, violencia, atentados, desigualdad, no pueden catalogarse como asfixiantes son sujetos a correcciones e interpretaciones mas nunca se puede ir en contra de sus designios equivocados. 

Es como menciona las escrituras se erigen cada vez más alto como queriendo llegar a ser más alto que Dios mismo. 

Isaías 14, 13 – 15 
Tú que decías en tu corazón: Subiré al cielo; en lo alto, junto a las estrellas de Dios, levantaré mi trono, y en el monte del testimonio me sentaré, a los lados del norte; sobre las alturas de las nubes subiré, y seré semejante al Altísimo. Mas tú derribado eres hasta el infierno, a los lados del abismo. 

Entendemos que el hombre en ocasiones no logra dar un fruto correcto, pero no quiere decir que siempre vaya a ser así porque tiene la capacidad de volver la mirada a Dios. 

Entonces Dios actúa para darle la corrección y reprensión. 

Pero como corriges una ideología instaurada en un gobierno que simplemente no está sujeta a corrección y reprensión. Simplemente pareciera estar simulando ser un Dios que no contrae culpa, tampoco es afecto a corrección. 

Es allí donde actúa enalteciéndose el demonio en el corazón de aquellos hombres que caen en el engaño de que un tipo de gobierno es el que les va a traer la paz la sostenibilidad, el dinero, la tranquilidad, ciertamente no hay verdad en eso. 

Las ideológicas y los partidos políticos siempre traen frutos malos porque no llevan corrección y reprensión. 

En la parábola del hombre atacado por ladrones y que le despojaron de todo cuanto tenía y dejarlo al borde de la muerte encontramos que el samaritano, el único que lo socorrió, es quien cura sus heridas, lo traslada en su burro a una posada a que se restablezca para antes de irse indicarle al mesonero. 

Lucas 10, 35 
Al día siguiente, sacó dos monedas de plata y se las dio al dueño del alojamiento. “Cuídemelo –le dijo–, y lo que gaste usted de más, se lo pagaré cuando yo vuelva”. 

Da claras luces que aquel caído a manos de los ladrones somos nosotros que tenemos las riquezas de Dios pero que el diablo nos la arrebata día a día –la salud, el trabajo, la esposa, los hijos, el salario– somo hombres y caemos en las garras del demonio, aquellas dos monedas de plata son los dos testigos de la revelaciones en apocalipsis aquellos que nos sustentarán porque estamos recuperándonos de los daños hechos por el maligno pues el pecado nos deja enormes vacíos, pero allí está Dios enviándonos sus dos testigos para que no tardemos en recuperarnos y aquello de “lo que gaste de más se lo pago cuando regrese”, es Jesús mismo que se marcha, se marchó de la tierra, porque su lugar es al lado de Dios su Padre, pero Él no tardará pues también indica que el demonio actúa por poco tiempo, viene y paga todas nuestras culpas para poder estar restablecidos completamente. 

Apocalipsis 11, 4 – 7 
Estos testigos son los dos olivos, y los dos candeleros que están en pie delante del Dios de la tierra. Si alguno quiere dañarlos, sale fuego de la boca de ellos, y devora a sus enemigos; y si alguno quiere hacerles daño, debe morir él de la misma manera. Éstos tienen poder para cerrar el cielo, a fin de que no llueva en los días de su profecía; y tienen poder sobre las aguas para convertirlas en sangre, y para herir la tierra con toda plaga, cuantas veces quieran. Cuando hayan acabado su testimonio, la bestia que sube del abismo hará guerra contra ellos, y los vencerá y los matará. 

Hemos caído en cuenta que son tres bestias ellos con el poder del dragón –la primera bestia– y en este texto claramente se ve que los vencerá el dragón porque es quien sube del abismo a dar muerte a los dos testigos. 

Apocalipsis 12, 9 
Así fue expulsado el gran dragón, aquella serpiente antigua que se llama Diablo y Satanás, y que engaña al mundo entero. Junto con sus ángeles, fue arrojado a la tierra. 

El anticristo también es la bestia como el dragón porque al igual que él se le da el trono y el poder del dragón. 

Apocalipsis 13, 2 
Y la bestia que vi era semejante a un leopardo, y sus pies eran como de oso, y su boca, como boca de león. Y el dragón le dio su poder, y su trono y gran autoridad. 

Como es de percibir se asemeja a la figura de Dios Padre con el de su hijo, Jesús nuestro Señor, porque así es como engañará a las naciones asemejándose a la figura de la trinidad, cuando venga utilizará un falso profeta que es el caso asemejarse a Juan el bautista quien preparó el camino de Jesucristo. 

Ahora notamos algo no puede semejarse a uno de la trinidad, al Espíritu Santo en ningún sentido muestra compasión por los hombres, eso solo lo puede dar el Santo Espíritu que nos dio Jesús a los hombres tras su resurrección luego de pentecostés.

Veamos un poco lo que puede hacer este falso profeta. 

Apocalipsis 13, 11
Después vi otra bestia que subía de la tierra; y tenía dos cuernos semejantes a los de un cordero, pero hablaba como dragón. Y ejerce toda la autoridad de la primera bestia en presencia de ella, y hace que la tierra y los moradores de ella adoren a la primera bestia, cuya herida mortal fue sanada. También hace grandes señales, de tal manera que aun hace descender fuego del cielo a la tierra delante de los hombres. Y engaña a los moradores de la tierra con las señales que se le ha permitido hacer en presencia de la bestia, mandando a los moradores de la tierra que le hagan imagen a la bestia que tiene la herida de espada, y vivió. Y se le permitió infundir aliento a la imagen de la bestia, para que la imagen hablase e hiciese matar a todo el que no la adorase. Y hacía que, a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se les pusiese una marca en la mano derecha, o en la frente; y que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuviese la marca o el nombre de la bestia, o el número de su nombre Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia, pues es número de hombre. Y su número es seiscientos sesenta y seis. 

Este falso profeta emerge de la tierra al igual que un hombre que fue formado del polvo, no como el anticristo que sube del mar. 

También se ha mencionado en el principio y remarcando que en el principio y en la creación Dios tiene toda potestad del tiempo pues es inicio y fin –alfa y omega– se ve claramente aquel dragón estaba sobre la faz del abismo, y esta para subir e ir a su destrucción, ya desde el inicio tiene este designio. 

Génesis 1, 2 
Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas. 

Vemos claramente que las tinieblas que es el diablo y satanás; el dragón del final del libro de la biblia ya estaba en génesis en el inicio de los tiempos, en cierto sentido da cuentas que quien notó el actuar de las tinieblas fue el Espíritu de Dios que se movía sobre la faz de las aguas. 

Es decir, fue solo la persona del Espíritu de Dios notó el más leve movimiento, cualquier cambio, cualquier hecho, lo sabía todo era el conocimiento de Dios impregnado en llevar a cabo los designios de la luz. 

Génesis 1, 3 
Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas. Pudo discernir las acciones de las tinieblas para separárseles. 

Jesús complementa este texto acerca de la luz porque los hombres esconden o se mantienen en tinieblas porque no reconocen en Él con sus obras y milagros ser el Hijo de Dios. 

Mateo 3, 19 – 21 
Y ésta es la condenación: que la luz vino al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas. Porque todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a la luz, para que sus obras no sean reprendidas. Mas el que practica la verdad viene a la luz, para que sea manifiesto que sus obras son hechas en Dios. 

Entonces reconocemos que Dios conoce el desenlace de salvación para todos los hombres, el diablo astutamente utilizará al anticristo y al falso profeta a quienes dará la autoridad que tuvo en el comienzo de la creación cuando era un ángel, pero que perdió y tras arrastrar un tercio de los ángeles en su rebelión contra Dios, y su destino es su destrucción, es el infierno. Es por eso que ese tercio de los ángeles son un tercio de las estrellas y cuando se haya cumplido las escrituras como también se indica allí ya no habrá necesidad de los astros para tener luz, ni el sol, ni la luna, ni las estrellas. 

Apocalipsis 21, 23 
La ciudad no tiene necesidad de sol ni de luna que la iluminen, porque la gloria de Dios la ilumina, y el Cordero es su lumbrera. 

El diablo y sus ángeles no se les tendrá más en la ciudad nueva, Dios enteramente remplazará a todos ellos que quisieron usurpar el trono de Dios. 

Apocalipsis 12, 6 
Y la mujer huyó al desierto, donde tiene lugar preparado por Dios, para que allí la sustenten por mil doscientos sesenta días. 

 Apocalipsis 12, 14 
Y se le dieron a la mujer las dos alas de la gran águila, para que volase de delante de la serpiente al desierto, a su lugar, donde es sustentada por un tiempo, y tiempos, y la mitad de un tiempo. 

Apocalipsis 11, 2 - 3 
Pero el patio que está fuera del templo déjalo aparte, y no lo midas, porque ha sido entregado a los gentiles; y ellos pisotearán la ciudad santa cuarenta y dos meses. Y daré a mis dos testigos que profeticen por mil doscientos sesenta días, vestidos de cilicio. 

La idea de mil doscientos sesenta días; luego por un tiempo, y los tiempos y la mitad de un tiempo –tres años y medio– y por último cuarenta y dos meses es porque Jesús, María como ellos utilizan este tiempo para obrar en servicio de la humanidad y es el tiempo necesario en sí para ellos en tener la perfecta concordancia con Dios. 

Desterrado el diablo de nuestros pensamientos de nuestra mente, los hemisferios cerebrales, nuestra corteza cerebral la parte esencial de nuestro cerebro vuelve a tener toda la plenitud que teníamos, restaurado como en el principio, en nuestra creación pues, así como en el universo hay un universo celestial el mismo es entendido en nuestro cerebro en las múltiples regiones podremos adoptar la naturaleza que Dios nos revistió en el edén. A eso se refiere cuando Jesús indica. 

Lucas 17, 20 – 21 
Preguntado por los fariseos, cuándo había de venir el reino de Dios, les respondió y dijo: El reino de Dios no vendrá con advertencia, ni dirán: Helo aquí, o helo allí; porque he aquí el reino de Dios está entre vosotros. 

Es desterrando todo hábito que el maligno hace en nuestro ser podemos sentir el reino de Dios entre nosotros. 

Son los pensamientos correctos que tenían el primer hombre y la primera mujer cuando los puso en el edén antes de la intervención de la serpiente antigua. 

Estamos actuando, entonces, en la dirección de comer el fruto del árbol de la vida eterna. También dijo: 

Mateo 13, 44 
Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo; el cual hallándolo un hombre, lo esconde, y gozoso por ello, va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo. 

Usó estas comparaciones para dar cuenta que se debe recibir con gozo, pero no es todo, se debe dar todo para tenerlo enteramente, el reino de Dios en gran medida es Dios actuando en nosotros todos los días de nuestras vidas, afianzar nuestros actos, poniéndonos enteramente en sus manos, orientar nuestras vidas como lo hizo Jesús en su Padre Dios.

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